Ford y Purdue mejorarán la recarga mediante refrigeración
En colaboración con investigadores de la Universidad de Purdue, en el estado norteamericano de Indiana, Ford quiere desarrollar un cable de carga que, gracias a un mecanismo especial de refrigeración, sea supuestamente "significativamente más eficiente que los productos habituales" y reduzca "teóricamente" los procesos de carga a la duración de un repostaje convencional.
Según Ford, el núcleo de la tecnología es un proceso, para el que ya se ha presentado una patente, en el que el calor generado cuando fluyen grandes cantidades de electricidad a través de un cable de carga se disipa mediante un líquido refrigerante especial. De este modo, en un "vehículo eléctrico debidamente equipado", el proceso de carga debería poder acortarse a unos minutos. Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer antes de que la tecnología se comercialice. En los próximos dos años, los socios quieren empezar primero con las pruebas exhaustivas de un prototipo de cable de carga.
"Hoy en día, los cargadores están limitados en cuanto a la rapidez con la que pueden cargar la batería de un VE debido al peligro de sobrecalentamiento. Cargar más rápido requiere que circule más corriente por el cable de carga", visualiza Michael Degner, Líder Técnico Senior de Investigación e Ingeniería Avanzada de Ford. "Cuanto mayor es la corriente, mayor es la cantidad de calor que hay que eliminar para mantener el cable operativo".
El enfoque de desarrollo adoptado por Ford y la Universidad de Purdue implica el uso de un refrigerante líquido que se evapora durante el proceso de carga. En teoría, debería ser posible incluso reducir el tiempo de carga de los vehículos eléctricos a la duración de los procesos de repostaje convencionales, según un comunicado adjunto. El proyecto se basa en los 37 años de experiencia de la universidad en métodos de refrigeración para sistemas eléctricos y electrónicos.
0 Comentarios